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Tras ese pequeño recordatorio, utilizamos los paos del gimnasio para golpear en ellos con dos fines: el más importante, para saber cómo golpear en caso de tener que hacerlo y hacerlo, de hecho, sin miedo y con confianza; el otro motivo... para desestresarse un poco de una semana agotadora por trabajo, exámenes, etc. Lo cierto es que fue bastante exitoso este ejercicio.
Después empezamos a meter algunas agresiones que suelen ser frecuentes en la calle, cuando asaltan para pedir dinero o todo lo que se lleve encima o agresiones con fines sexuales.
En la calle podemos encontrarnos situaciones que escapen a nuestro control, por ello siempre es bueno entrenar cualquier tipo de situaciones conflictivas con el fin de saber que podemos hacer algo para salir de ese mal momento y no pensar que ya no hay solución posible. Por ello, en esta ocasión hemos metido situaciones de ataques o amenazas con cuchillo.
Lo cierto es que realizamos varias técnicas desde diferentes agarres y situaciones; incluso, vimos que se puede ayudar a una persona que está siendo atacada y no es necesario mirar hacia otro lado como suele pasar casi siempre, por desgracia. Con todo ello, las dos horitas del curso se pasaron muy rápidamente y eso es siempre bueno, porque quiere suponer que el curso fue agradable y ameno además de siempre interesante con las explicaciones de nuestra compañera Patricia. Agradecemos también a nuestro compañero Noel que se dejara pegar un poquito, ya que en principio fue a acompañar a su madre y finalmente acabó recibiendo algunos golpes...
Por último, una fotito de grupo a modo de recuerdo...
Gracias a Elena, Tere, Marina, Conchi, Montse, Ali y Nieves por asistir y aprovechar el curso.
Esperamos que al próximo pueda acudir nuestra incondicional Nuria que en esta ocasión no estaba muy bien físicamente y no pudo acudir. Esperamos que te mejores pronto.
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